Todos los días, mi jefe me pregunta a los gritos porque llego tarde al trabajo. Durante minutos, largos minutos a veces, él me recrimina por mi falta de responsabilidad, amenazándome con sancionarme, suspenderme, despedirme… Yo intento justificarme, explicarle el motivo de mi demora, pero no hay caso, no me escucha, solo grita y luego se va, insultándome enloquecido, metiéndose en su oficina ofuscado para terminar cerrando la puerta con furia en mi propia nariz. Aunque a decir verdad, se que de todas maneras tampoco le gustaría escuchar mi explicación de lo que en realidad sucede. ¿Cómo le explico que si llego tarde es porque antes de venir al trabajo yo paso por su casa para visitar a su esposa? No tengo la culpa de que él esté todo el día encerrado en su oficina y se olvide por completo de su mujer. Ni tampoco tengo la culpa de que su fogosa mujer no quiera que yo me vaya tan rápido de su casa…
¡¿¿Lo qué??!
Hace 3 horas.
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