Obra de Rocío Tisera

sábado, febrero 20

La casita del hornero


Yo ya había leído aquello de que “el hornero es el arquitecto de las aves”, o “el hornero es un pájaro que construye una casita en donde vivirá y criará a sus pichones”, pero esto ya me parece demasiado. A no ser que este hornero tenga una buena posición económica. ¿Será el dueño de esos campos que se ven detrás?

jueves, febrero 18

No tengo pasado

Obra de Gustavo Piñero



No tengo pasado. Es mentira que he vivido lo vivido por ese ser con el cual comparto mi nombre y mi apariencia. Es una falacia lo que dicen aquellos que me conocen. Yo nunca amé a esa mujer, por ejemplo, de quien no recuerdo ni su nombre ni su rostro. Yo no estuve aquella noche tan borracho como para romper los vidrios de todas las ventanas de su casa. De ser así lo recordaría. Yo no fui tan cruel, ni tan despiadado, ni tan imbécil, ni tan ingenuo, ni tan violento con ella, como suelen contar por ahí. Ese yo no fui, debería acordarme de ello si fuera así. Porque yo no tengo pasado, no tengo recuerdos. Ese fue otro. Otro ser con mi nombre y mi rostro. Por eso no creas lo que te dicen mis amigos de toda la vida. Yo tan solo doy fe, solo me hago cargo, de lo que estoy haciendo ahora. Ahora. En este preciso momento.

martes, febrero 16

Tocayos Célebres 5: Gustave Doré


La Divina Comedia



Enloquecimiento de Don Quijote



El ilustrador francés Gustave Doré (1832-1883) realizó grabados de gran inventiva y teatralidad que acompañan a muchas obras clásicas de la literatura mundial como por ejemplo “La vida inestimable del gran Gargantúa”, de François Rabelais (1853), “Cuentos extravagantes”, de Honoré de Balzac (1855), “La Divina Comedia”, de Dante Alighieri (1861), “Don Quijote de la Mancha”, de Miguel de Cervantes (1863), “El Paraíso perdido” de John Milton (1865), “Las aventuras del barón de Münchhausen”, de Rudolf Erich Raspe (1866) y “la Biblia” (1866).
En las imágenes podemos ver dos geniales ilustraciones, una que realizó para “La Divina Comedia” y otra para “Don Quijote de la Mancha” (“Enloquecimiento de Don Quijote”).

domingo, febrero 14

Desangrando

" La ciudad despierta". Pintura de Umberto Boccioni

De pronto el cielo se abrió de par en par, y dejó ver por completo sus entrañas.
De Él, de su herida profunda, brotó una luz blanca que todo enceguecía y que desde las alturas chorreaba imparablemente. El cielo se estaba desangrando, salpicando la tierra con rayos, centellas y relámpagos. Miles de estrellas fugaces surcaban a su vez sobre nuestras cabezas y comencé a sentir como mi cuerpo ardía. Era imposible hallar un refugio, porque todo ya estaba en llamas, todo se incineraba. Mi rostro, totalmente enrojecido, se elevó lastimosamente y comencé a insultar a ese maldito cielo. Y cuando todo parecía que ese castigo cósmico sería interminable, poco a poco el cielo fue quedándose sin energía, sin vida. Y así, de una secuencia a otra, la oscuridad fue ganando espacios en las alturas y la única luz que quedó alumbrando era la que provenía del fuego que consumía todo lo que hallaba en la superficie. Luego de todo el caos vivido, comprendí que en ese momento era mi cuerpo quién se estaba desangrando, salpicando la tierra que ardía. Era mi sangre, la luz que brotaba de mis entrañas…

martes, febrero 2

Tocayos Célebres: Gustave Flaubert


El novelista francés Gustave Flaubert (1821-1880), encuadrado dentro de la escuela realista, es el autor de una de las obras maestras de la literatura de todos los tiempos: “Madame Bovary”, publicada en 1857. Flaubert se destaca por su continua búsqueda de la perfección literaria. En sus novelas realizaba una meticulosa observación y descripción de los detalles de la vida, teniendo como contrapunto una forma y un lenguaje románticos.
Estos son algunos pensamientos que le pertenecen:

-No le demos al mundo armas contra nosotros, porque las utilizará.
-El futuro nos tortura y el pasado nos encadena. He ahí porque se nos escapa el presente.