
De la misma manera en que esa primera sombra simula ser la de una madre llevando en el cochecito a su bebé y en realidad es una mujer con su carrito de compras… Al igual que la siguiente silueta que aparenta ser la de un cazador apuntando su rifle, apunto de dar muerte a su presa, y que en verdad es la de un músico, un inspirado flautista ejecutando su bello arte… Tal como el último perfil que parece representar a un desesperado suicida pero que al fin y al cabo se trata simplemente de un hombre con su secador de cabello… Así, de la misma manera, mi sombra, aquella que yo proyecto en las paredes, en el suelo, en las calles, me muestra como un cándido ángel alado, un ser celestial y bondadoso, y la gente se deja convencer por esa representación. No saben, no se imaginan, que en realidad soy un asqueroso y repugnante demonio, un diablo que en lugar de estar en este mundo obrando el bien, se dedica solo a desear el mal…
2 comentarios:
Proyecto la imagen de una alocada mujer, insensible y con caracter, pero en realidad soy una niña indefenda y soñadora.
Saludos
Es la primera vez que proyecto mi sombra en este blog, y sin saber cómo se verá tampoco creas que me importa... sólo sé que seguiré pasándome por aquí, que no es poco para un miércoles por la mañana.
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