Obra de Rocío Tisera

sábado, agosto 22

Golpes

Así debo verme algunos días, con el rostro deformado por los golpes, tal como este pobre boxeador. Golpes, puñetazos, que lanzan el cruel destino, las desilusiones, las traiciones, las injusticias, las penas, el desamor… De vez en cuando, alcanzo a esquivar algún que otro gancho al hígado, algún cross de derecha, pero siempre acabo desmoronado en la lona, escuchando resignadamente la cuenta del árbitro. Desde el piso, atontado, escucho a lo lejos la cuenta del réferi: “1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9…”, y suspirando profundo, juntando coraje, vuelvo a levantarme, maltrecho, adolorido, mareado, confundido, pero de pie, y diciéndome: “¡Qué sea lo que Dios quiera!”
Es que de eso se trata la vida, ¿no? Es caer y volver a levantarnos, una y otra vez.

6 comentarios:

Solera dijo...

así es esto, historias relacionadas alrededor de nosotros, simultáneas, teatro de lo absurdo con introducción, nudo, clímax, conclusión

una y otra vez :) que cuento quieres ser hoy?

Solera dijo...

así es esto, historias relacionadas alrededor de nosotros, simultáneas, teatro de lo absurdo con introducción, nudo, clímax, conclusión

una y otra vez :) que cuento quieres ser hoy?

Graciela L Arguello dijo...

Duro, pero ¡qué cierto!!!!!

Un beso Graciela

Kareen dijo...

Asi es la cosa! Y el que no se levanta por miedo a volver a carse se pierde de unas...

Como siempre muy bueno el blog. A todo esto, cambie' la direccion del mio.

Saludos ;)

Rubia de la cuarta fila dijo...

Así me encuentro yo ahora mismo, levantandome de más de un duro golpe demasiado imprevisible para poder ser esquivado.
Lévantate, respira hondo y percibe el olor a hierba recién cortada.
Deja que el sol dore tu piel.

Un beso.

Kair dijo...

Así parece que funciona la cosa... Puro movimiento y transcurrir alborotado. Tanto plan, tanta previsión, y al fin de cuentas, la vida el destino o lo que sea, nos deja, otra vez, de cabeza ( o de la cabeza)... Lo que hoy es, mañana no, y viceversa. Toda una realidad impermanente.
Mirando hacia adentro vemos que existe algo que perdura y trasciende los ruidos del mundo: el rencuentro con la propia esencia y verdadera naturaleza colma de paz. Y es entonces cuando sobreviene la templanza de saber que "esto tambien pasará".

"Si te caes 7 veces, levántate 8"
(Proverbio chino)

Me encantó el escrito :)
Saludos!