De pronto dejo de correr como un loco, de hablar sin escuchar, de actuar sin pensar, de vivir sin gozar. Simplemente me detengo y respiro profundo, estiro el cuello y guardo silencio, para que inevitablemente me comience a hacerme preguntas: ¿Qué estoy haciendo? ¿En donde estoy? ¿Hacia donde voy? Y me doy cuenta de que nada tiene sentido, de que no existe una razón lógica que pueda explicar, porque el mundo se maneja de esta manera y porque nosotros nos embarcamos ciegamente en esa locura maldita. Y lo peor de todo, no es el desconocer la mágica solución de esta pesadilla. Lo peor es que muy pronto dejaré de escribir, y nuevamente, volveré a correr como un demente…
Los meses del año
Hace 1 día.
2 comentarios:
de dejar de escribir,nada!
corre todo lo que quieras,
pero llava siempre encima
una libretita y un lapiz.....
bsitos.
los que escriben cuando se detienen a pensar son los científicos... es mejor escribir sobre la marcha, describir de manera alocada los sentimientos encontrados y realizados durante la loca carrera de la vida.
Publicar un comentario