Ayer terminé de leer un libro muy interesante que trata sobre recientes investigaciones acerca de la telekinesis. Como el tema me atrajo demasiado, intenté hacer este simple experimento con el simple propósito de ver que es lo que podía pasar.
Hace más de una hora que estoy sentado frente a la mesa, con mi mirada fija en ese vaso vacío, con mi mente absolutamente concentrada en él, intentando moverlo, desplazarlo, arrojarlo, cualquier cosa con tal de que ese maldito vaso deje de estar en reposo, en el mismo lugar, intentando con todas las energías de que a través de mi fuerza mental logre impulsarlo…
Pero ahora me estoy convenciendo de que eso es imposible y que nunca voy a lograrlo. Nunca.
Acabo de darme cuenta de que aquel tipo que está sentado justo frente a mí es, ni más ni menos, que quien antes solía ser yo, o sea antes de convertirme en lo que soy ahora, un simple vaso de vidrio vacío, completamente inmóvil, que se encuentra arriba de la mesa.
2 comentarios:
:O
Vengo leyendo de arriba para abajo tus posts y puedo decirte que si bien me encanta Salzano, no tenés nada que envidiarle. Son dos estilos diferentes pero buenísimos ambos. Un beso Graciela
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